Trump, armado de mentiras, domina el encuentro ante un Biden débil y difuso. “Ni él mismo sabe lo que acaba de decir”, lanza el magnate. “Eres un perdedor”, dice el presidente.
El primer debate presidencial de Estados Unidos entre Joe Biden y Donald Trump ha estado marcado por un ataque frontal del magnate ante los lapsus del actual mandatario, que tras los titubeos iniciales ha intentado la remontada en la recta final. El republicano ha dominado el cara a cara arremetiendo con toda su artillería y armado de mentiras, de la agenda migratoria a las guerras en Ucrania y en Gaza, y se ha ensañado con su contrincante, débil y difuso, ante una de sus vacilaciones. “Creo que ni él mismo sabe lo que acaba de decir”, ha lanzado. “Eres un perdedor”, le ha dicho poco después el presidente a raíz de una referencia despectiva a los veteranos e invocando a su hijo Beau, que sirvió en Irak y falleció de un cáncer cerebral. El demócrata ha defendido las sentencias de los condenados por el asalto al Capitolio. “Los que están en la cárcel por el 6 de enero merecen estarlo”, ha enfatizado frente a la posición del republicano, que ha calificado la insurrección de “protesta pacífica”. La vicepresidenta, Kamala Harris, ha rechazado la tesis de un Biden vacilante. “Hubo un principio débil pero un final fuerte. Biden es extraordinariamente fuerte”, ha afirmado al término del debate.
Hora y cuarenta de debate: 15 temas, alegatos de cierre y una despedida en silencio
Los dos candidatos han tratado un total de 15 bloques temáticos. En el primer bloque se han centrado en la economía (que, según las encuestas, es lo que decidirá el voto para el 90% de la población estadounidense que vaya a las urnas), deuda nacional, aborto (centrado en el fallo del Supremo que tumbó Roe v. Wade, hace ahora dos años), inmigración, política exterior, Israel, democracia (centrada en el asalto del 6 de enero de 2021) y en los delitos de ambos. En el segundo bloque, han continuado con cuestiones que afectan a la población afroamericana, el cambio climático, seguridad social y pensiones, atención a la infancia, adicciónes y opiodes, la edad de ambos y violencia policial.
Tras una segunda pausa, ambos candidatos han realizado sus alegatos finales en un par de minutos cada cual. Después, los presentadores han despedido el debate y se ha podido ver a Biden y Trump sobre sus atriles, en silencio, sin mirarse. Mientras que Trump ha salido rápido del plató, el presidente de EE UU ha sido ayudado por su esposa, Jill Biden, a bajar el escalón del estrado y ambos se han acercado a saludar a Jake Tapper y Dana Bash, los periodistas de CNN que han moderado el evento televisado.